La final varonil de Roland Garros tiene a Rafael Nadal como amplio favorito, pero del otro lado de la cancha tendrá a uno de sus aprendices: Casper Ruud. El noruego de 23 años hizo historia en esta edición del torneo y peleará por el título contra uno de sus ídolos.
Más allá de cumplir el sueño de llegar a una final de Grand Slam, el número ocho del mundo consumó uno de sus deseos de la infancia al enfrentar a Nadal en esa instancia. Hace algunos años se convirtió en alumno de su academia; por ello, podemos ver similitudes en el juego de ambos.
Casper Ruus no ocultó su emoción por disputar está final y destacó que practicó con el español algunas veces. “Es verdad que hemos jugado algunos sets de entrenamiento. Siempre me ha ganado. Será un momento especial porque Rafa ha sido mi ídolo durante toda mi vida. Está teniendo enfrente a un estudiante de su academia, así que espero que sea divertido“, declaró.

Casper Ruud, el fanático del golf que hace historia para Noruega
Casper Ruud es el orgullo del tenis en Noruega y sigue los pasos de su padre, Christian. Extenista y con participación hasta la tercera ronda de Roland Garros, hoy se encarga de entrenar a su hijo para alcanzar la gloria. Ambos pasan mucho tiempo juntos y no solo por el deporte de manera profesional.
Padre e hijo disfrutan de jugar golf juntos y así se distraen de su día a día en las canchas. Casper Ruud también es fan del hockey, aunque en más de una ocasión ha demostrado sus habilidades con el balón de futbol. “Si antes hubiera tenido que elegir algo que no fuera tenis, habría elegido ser un jugador de golf profesional“, reveló hace tiempo.
En este ‘lado B’ de Rudd también encontramos el arte, pues es bueno dibujando y solía hacerlo regularmente cuando era más joven.
Sin embargo, volviendo a lo deportivo y a su carrera profesional como tenista, Casper Ruud se convirtió en el primer noruego en disputar una semifinal y por supuesto, final de Roland Garros. Ya presume ocho títulos de la ATP incluyendo Buenos Aires, Ginebra y San Diego; no obstante, tiene una oportunidad de oro para conseguir su primer Grand Slam.
El mismo Nadal se ha encargado de alagar al noruego; asegura que es un alumno ejemplar, metódico y humilde, con predisposición para aprender. Ahora aprendiz y maestro chocarán en la mítica cancha Phillippe Chatrier en lo que seguramente será un episodio histórico para el tenis.
